Monday, May 31, 2010

Trabajo

Justo hoy que estoy en plenas vacaciones decido hablar del trabajo. Sí, justamente hoy, porque a pesar de estar de vacaciones de mi trabajo que me da salario, sigo trabajando. Quiero decir, y a esto me refiero cuando a algunos de Uds. les digo por chat o por email: “bueno, sigo trabajando”, que sigo escribiendo. Escribir es mi trabajo.
            Muchos asocian trabajo con algo que deben hacer para obtener un sueldo y así comer, pagar el alquiler, etc. Ven el trabajo como una obligación y por ende toman por sentado que a nadie le gusta trabajar. A mí sí me encanta trabajar. Me encanta escribir, pensar, editar. Ese es el trabajo que más me gusta. Ese es un trabajo que no me da de comer, es un trabajo que nadie me obliga a hacerlo, es un trabajo del cual no hay vacaciones. Porque además, es un trabajo al cual el escritor se obliga y se compromete a encontrarle un espacio, porque muchas veces tantas cosas nos pueden distraer o no “dejar tiempo” para eso: estudios, trabajo remunerado, familia, ir al supermercado, lavar la ropa, cocinar, etc.
            Lo llamo trabajo porque lo es, y acá van unas definiciones de la RAE que lo explican bien:
·         Ocuparse en cualquier actividad física o intelectual.
·         Ejercer determinada profesión u oficio.
·         Intentar conseguir algo, generalmente con esfuerzo.
·        Aplicarse o dedicarse con esfuerzo a la realización de algo.
Creo que esto lo dice todo. Lo que no dice es el placer que da, a pesar de que te saque canas a veces, y no sea una tarea fácil.
            He trabajado (me refiero a trabajos remunerados) en muchas cosas en mi vida: trabajé en una plantación de bananas; trabajé de babysitter, trabajé de secretaria; hice traducciones; edité artículos, ensayos, poemas, cuentos; trabajé escribiendo transcripciones, trabajé de mesera, trabajé en una librería, trabajé como representante de servicio al cliente, y ahora trabajo de profesora en la universidad. Y la verdad es que todos mis trabajos, por una razón u otra, me han dado y/o me dan gratificación. Cuando un trabajo me deja de gustar, busco otra cosa.
            Mi trabajo de escribir lo he ejercido desde que tengo como 10 años. Cuando tenía 10 años no lo tomaba como trabajo. Escribía, sí, pero era diferente. Recién después de los 20 lo empecé a tomar más en serio, a darme cuenta que ese era mi trabajo de verdad.
            Sin embargo, lo que no admito es que venga otro escritor y se crea que porque él o ella ejerce su trabajo con determinada disciplina, los demás tengamos que seguir la misma. Hay gente que trabaja mejor a las 5am, otros trabajan mejor de noche, otros trabajan todos los días, otros prefieren día por medio. Sea lo que sea, cada uno tiene que encontrar su ritmo, su horario, su espacio, y sin imponerse sobre los demás.
            Bueno, sigo trabajando.

Tuesday, May 11, 2010

Llamar al agua por su nombre en Juárez

Me gustaría invitarlos a todos a la presentación de Llamar al agua por su nombre  en Ciudad Juárez, México.

Será en la Cafebrería S Y L a las 7pm.

¡Nos vemos allá!